~Y lo invisible se hizo visible~

  Como no, aquí Sue siempre llegando tarde, es que hay que ver ¬¬' 
Bueno como muchos ya sabréis del año pasado, en el blog de Alma con Arte en estas mismas fechas se organizó un amigo invisible, y como no, servidora tuvo que participar.


Y este año me toco Kiss de Mi tuenti 2.
Querida Kiss, disculpándome de antemano por la demora, me voy a escusar también por el relato, ya que hace mucho que no escribo, ya que no encuentro ni la magia ni la inspiración, pero espero que te guste, por que aun que me haya quedado raro, lo he hecho con mucho cariño.

[…]

-Corre, corre, corre- me repetía una y otra vez a mí misma.

Sabía que estaba soñando, así que me limite a repetir el sueño como en las veces anteriores, incapaz de salir de este.

Correr.

Eso es lo que hacía siempre, correr, correr y correr hasta no poder más y caer.

Caer y terminar vencida como siempre.

Vencida siempre por la misma persona.

La misma persona que me vio crecer.

Crecer en un mundo que nada es lo que parece.

Parecer alguien que no eres

Ser alguien diferente cada día.

[…]

-Día nublado- pensé, mientras me levantaba -Nublado aunque allí afuera, detrás de esa puerta, dónde el sol resplandecía, no hubiera ninguna nube. Ninguna que pudiera predecir un día mejor, un día lluvioso, un día lluvioso y frío, un día de esos en los que la gente huye a sus hogares intentando escaparse de esas gotas de lluvia que caen del cielo con el único objetivo de borrar nuestros errores, o simplemente de arruinar el día de un amante de los días soleados y calurosos. Uno de esos amantes del sol que en todo caso no era yo.

Me vestí y salí rápidamente de aquella casa...sin despertar a nadie.

Un viento típico de las mañanas de primavera me azotó en cuanto puse un pie fuera del edificio.

A los pocos minutos llegue a la librería y mis dedos se deslizaban temerosos por las miles de aventuras que guardaba una de las estanterías de aquel lugar, mientras sentía la mirada del dependiente clavada en mi, hice caso omiso y seguí ojeando todos los ejemplares sin saber por cual decidirme, me arrodille y me perdí en la magia de las palabras que me ofrecía cada libro.

Cerré los ojos fuertemente, recorrí cada volumen y cogí uno al azar, abrí los ojos y gire el libro para ver el precio, sin desvelar el contenido, lo deje a mi lado; esta vez llamarón la atención dos libros de una portada un tanto antigua, los puse encima del primero que cogí y continúe.

-Perdona, vamos a cerrar- dijo el dependiente provocando que uno de los libros se me resbalara de las manos y impactara de mala manera en el suelo.

-Lo siento, ahora acabo-dije, escuchando como suspiraba sonoramente y se marchaba.

Recogí los tres libros del suelo y mire el reloj; aun era demasiado pronto, así que camine lentamente hacia la caja, recorriendo con la mirada cada uno de los títulos, hasta que mi mirada se encontró con la del dependiente y finalmente me rendí y me acerque a él con los libros de mala gana

-Se lleva este ejemplar de regalo por haber realizado una compra superior 20 €- dijo en tono que parecía casi conciliador.

-Gracias- intente sonar displicente, fracasando en el intento.

Salí de la librería, un poco molesta por el hecho de no haber estado todo el tiempo que yo hubiera querido, empecé a caminar despacio hacia el café de la esquina, al abrir la puerta de este me invadió un cálido aroma a chocolate, hice señas al dependiente y me senté en una de las mesas del fondo a esperar mi chocolate caliente de cada mañana, nada mejor para empezar una triste vida que un delicioso chocolate, abrí mi libro y me dejé envolver rápidamente por aquellas palabras, al poco tiempo llegó uno de los camareros dejando mi pedido.

Casi a regañadientes puse el punto de libro abandonando mi lectura, entonces recordé que aun no había visto el libro que me habían regalado, sin más dilación lo extraje de la bolsa y me quede embelesada por la portada; que consistía en una estrella aneja a una media luna, el título no aparecía por ninguna parte así que con mucho cuidado y como si mi vida dependiera de ello, abrí el libro; sentía un hormigueo recorrer todo mi cuerpo al fijarme en las palabras que contenía la primera página, escritas con una caligrafía casi perfecta…

~Empieza a correr tanto como puedas, porque a veces los sueños sí que se hacen realidad ~

Y como sé que te gusta leer, he hecho el intento de un punto de libro, espero que encuentres la magia en todo aquello que se presenta ante tus ojos, y que estas fiestas se vean teñidas con un sabor dulce y eterno!

(~Dale a la imagen y se ampliará~) 

Un beso blogosferico enormeeeee!